Translate

martes, 29 de diciembre de 2009

MaRía

Conocí a MaRía hace siete años en un campamento en Irlanda, donde pasaríamos un mes para mejorar nuestro inglés. Ninguno de los dos queríamos ir en un principio, y nuestra timidez de entonces no ayudaba a que nos apeteciera socializar con un grupo de desconocidos; como suele pasar en estos casos luego no queríamos volver a casa, pero esa es otra historia.

El caso es que uno de los primeros días coincidimos en la guagua que nos llevaría a Glendalough, un paraje natural al que nos llevaban de excursión. Siendo consecuente con mi habilidad para llegar tarde (cualidad que ella sigue sufriendo), fui el último en acudir al punto en el que habíamos quedado, así que para cuando subí a la guagua estaban todos los asientos cogidos… menos uno; María había decidido sentarse sola para estar a su bola, y cuando nos vimos tratamos de disimular con una sonrisa (sin conseguirlo) la frase que a ambos nos vino a la cabeza: "¡Me cago en todo!"

Nos pusimos a hablar de banalidades más elaboradas que las que saca uno a colación en un ascensor, pero sin esforzarnos tampoco demasiado en caer bien; estaba claro que no teníamos ningunas ganas de conocer al otro. A todas estas no fue esa la primera vez que la casualidad nos quiso poner juntos; ya en el avión nos había tocado al lado; con un pasillo de por medio, pero al lado al lado al fin y al cabo. Parecía que por mucho que quisiéramos ir de antisociales íbamos a relacionarnos sí o sí, y por si esos dos episodios no fueran suficientes, fue a su lado donde me tocó sentarme a los pocos días de clase, cuando me cambiaron de grupo y pasé al nivel avanzado.

A partir de entonces comenzamos a llevarnos (¡qué remedio!), y con el paso de las semanas nos sorprendimos de lo encantados que estábamos de conocer al otro. MaRía y yo éramos muy parecidos en muchos sentidos, y era genial haber encontrado a una persona con la que conectaba a tantos niveles. Paseando por las calles de Dublín nos convertimos en íntimos, y supimos que nuestra relación no se iba a romper una vez que volviéramos a casa, todo lo contrario: se ha intensificado hasta niveles casi insaludables.
Pasar una tarde juntos se suele convertir en toda una experiencia, y parece que por muchas horas que dilatemos nuestros encuentos, jamás nos cansamos el uno del otro; es un lujo por el que me siento afortunado.
No sé qué será de mi vida dentro de 10, 20 o 40 años, pero sé sin ninguna duda que María seguirá presente en ella. Eso por supuesto.

¡Felices 25, tranque!



11 comentarios:

$MK dijo...

La MaRíA de la hablas es la misma MaRíA fan de Michael Jackson que se pasa por mi blog? Se lo preguntré jejje...

No te contaré como llegué a Uk y me quedé ahí tres años, ya que su argumento es muy similar a una peli de Billy Wilder con Jack Lemon en el papel principal. naturalmente yo sería el equivalente a Jack Lemmon.
Eso sí aprendí inglés por un tubo, hasta las jergas (Slang).

Un saludo!

Anónimo dijo...

El post tiene un toque notable de romanticísmo, y ya la canción me mató. Me encanta Ronan Keiting. Cada vez tengo mas curiosidad por saber como eres en realidad, ponerte cara y eso.

Juliet dijo...

Es curioso como existe gente que entre sí tiene una conexión especial, y que parece que el destino insiste para que eso ocurra... mi caso es parecido.

Un saludo noi!

Orderonime dijo...

Me encanta la historia y cómo la has descrito.. y la bso de Ronan Keating que le has puesto..

un beso.

MaRía dijo...

Acabo de encender el ordenador para ponerme al día (no lo encendía desde ayer a mediodía) y me ha dado un escalofrío al ver que me habías dedicado esta entrada. Como no, yo soy así de llorona, me he emocionado una vez más al escuchar aquella canción que tantas veces escuchamos en Dublín: la primera de tantas que nos unen ahora... The touch of your hand says you catch me whenever I fall...

La primera vez que te vi en el avión yo tampoco me imaginé que te convertirías en alguien tan importante en mi vida. Nunca había conectado tan bien con nadie y cada vez que pienso en la de momentos que hemos vivido juntos (geniales, agradables, felices, regulares, insulsos, raros, inusuales, extraños, estúpidos, tristes, nefastos...) me doy cuenta de lo presente que te tengo en mi vida. Ten por seguro que dentro de otros 25 años, sean como sean nuestras situaciones, la cena de la noche de mi cumpleaños siempre será contigo.

Mil gracias y aunque ya lo sabes, te quiero con locura nené ;) Nos vemos esta noche.

JuanRa Diablo dijo...

A MaRía ya la he felicitado en su blog, pero lo vuelvo a hacer por aquí pues al fin y al cabo éste es SU post. ¡Felicidades MaRía!

También te voy a felicitar a tí, Peibol, por la inmensa suerte de tener una amistad tan bonita, de esas que no tienen fisuras y con la que, como una vez dijiste, te encuentras bien aun sin pronunciar palabra.
Que conservéis ese tesoro durante toda vuestra vida.

Un abrazo para los dos!

PD. No dices nada de los retratos de Mogliani. Se parece, no??

MaRía dijo...

Por una parte, gracias JuanRa :)

Por otra, mil veces gracias otra vez por todo anoche, love. Ya hablamos. Un abrazo enorme.

peibol dijo...

$.M.K:
Sí, es la misma, y de hecho es gracias a ti que vio esta entrada a tiempo; me contó que hoy no iba a entrar en el blog, pero que al mandarle tú el enlace se llevó la sorpresa a tiempo, ahorrándome a mí el tener que mandárselo para asegurarme de que lo leyera antes de que cenáramos por la noche. Infinitas gracias, pues tu curiosidad hizo que mis planes salieran a la perfección :D

Trouble:
La canción sonó muchísimo cuando hicimos aquel viaje, y ya se ha convertido en el tema principal de su banda sonora. :D. Te confesaré algo; ya me has visto :o

¡Chan, chan chan!

Descubrí tu blog a través de la Imantada, que me lo recomendó porque sabía que me gustaría tu estilo escribiendo. Cuando le pregunté que quién eras, me contó que trabajabas por donde trabajas (no lo diré para conservar tu anonimato), uní pistas, y sí, resulta que ya nos hemos visto... pero sin saberlo :p

Juliet:
Sí, es algo de lo que ella y yo hemos hablado miles de veces, porque además, de no haber sido por ese viaje es muy improbable que nos hubiéramos conocido. :o

Orderonime:
Gracias :D

MaRía:
¿Te has puesto llorona? ¡Qué voy a hacer contigo! XD Ahora en serio, me halaga mucho.

Hacía tiempo que tenía pendiente dedicarte una entrada como Dios manda; ya en otras lo había hecho indirectamente, como en la posterior a la vuelta en bici o la de Michael Jackson, pero me apetecía una sin protagonismo compartido; sin más título que tu nombre ni más contenido que tu esencia. And... this is it! ;)

No quisiera repetirme mucho más de lo que ya lo he hecho entre ayer y hoy, pero nunca sobra decir que tú también estás más que presente en mi vida, y que estaré encantado de seguir para siempre celebrando tus cumpleaños contigo.

Un abrazo nené. :)

JuanRa Diablo:
Sí, se parece bastante; yo suelo decirle que, aunque no lo sepa, en el pasado posó para él XD.

Gracias por la felicitción. ;)

¡Saludos!

indo dijo...

es que hay veces que la amistad surge y ya no hay quien se la quite de encima, jejeje.
da gusto tener gente así en la vida, no sentirse solo, ni triste ni vacío. saber que pasarán los años pero la gente permanecerá.
en fin, por si no nos bloggeamos antes, feliz año.
un beso.

Gonzalo Viveiró Ruiz dijo...

Bonito, me ha gustado...

peibol dijo...

Gracias a ambos ;)

Tienes razón Indo; en este caso, no hay vuelta atrás. :D